Errores comunes al vender una casa en Córdoba (y cómo evitarlos)

Cómo Vender una propiedad

/ CASTIÑEIRA SALGUERO INMOBILIARIA

Vender tu casa puede ser uno de los momentos más importantes de tu vida. No solo porque hay una venta material, sino porque detrás hay sueños, necesidades, esperanzas y decisiones que sentís como propias. Por eso, evitar errores comunes no es solo “no perder plata”, sino hacer que ese proceso sea menos doloroso, menos lento, más justo.

Aquí te dejo los errores que veo que más se repiten en Argentina, sobre todo en Córdoba, y cómo evitarlos de verdad.

1. Fijar el precio sin basarse en datos reales

El error: poner un valor demasiado alto “porque es lo que uno siente que vale”, o demasiado bajo “porque quiero vender rápido y me conformo”. Ambos extremos pueden salir caros: el primero aleja compradores, el segundo te hace perder lo que podrías haber obtenido.

Cómo evitarlo:

  • Pedí una tasación profesional o valoración de inmuebles en tu zona. Un agente con conocimiento del mercado local te mostrará ventas recientes con condiciones similares y te orientará.

  • Observá lo que hay en venta HOY, no lo que se vendía hace un año o lo que vos compraste. El mercado cambia, los barrios cambian, los servicios cambian.

  • Establecé un rango: un precio ideal, uno realista, y otro mínimo aceptable. Que no te agarre la urgencia para bajar más de lo necesario.

2. Descuidar la presentación de la propiedad

El error: dejar que falte limpieza, reparación de detalles, presentación pobre. Un comprador cuando entra ve todo: luces, olores, paredes, estructura, cosas que quizás vos ya ni notás, pero que influyen muchísimo.

Cómo evitarlo:

  • Hacé una limpieza profunda. Ventilá. Sacá objetos personales que distraigan. Pintá si hace falta, arreglá grietas, filtraciones.

  • Acomodá los espacios: iluminación, distribución, que cada ambiente muestre lo mejor posible lo que puede ofrecer.

  • Considerá hacer staging: es poner tu casa en el mejor “producto” que puede ser, no solamente arreglar lo básico, sino ayudar al comprador a imaginarse viviendo ahí.

3. Mala calidad fotográfica y descripciones pobres

El error: fotos oscuras, espacios cortados, ángulos que no favorecen. Descripciones que dicen “casa luminosa en buena zona” pero no aclaran nada útil. Eso hace que tu anuncio pase desapercibido, o peor: genere falsas expectativas que generan decepción.

Cómo evitarlo:

  • Si podés, contratá un fotógrafo especializado en bienes raíces. Que las fotos salgan con buena luz, orden, mostrando lo mejor de cada ambiente, los espacios exteriores, los accesos, los detalles que suman.

  • En la descripción del anuncio: sé claro/a. Medidas, distribución, servicios cercanos, orientación, estado de las instalaciones. No des información confusa ni muy genérica.

  • Aprovechá todas las plataformas disponibles: portales inmobiliarios, redes sociales, plataformas locales. Cuanto más exposición, mejor.

4. Documentación incompleta o en desorden

El error: no tener todos los papeles en regla, tener deudas municipales, de servicios, estar con escasa claridad sobre la titularidad. Ese tipo de cosas demoran muchísimo la venta, desalientan al comprador y pueden causar problemas legales.

Cómo evitarlo:

  • Verificá que la escritura esté al día, que todos los impuestos / tasas / servicios (luz, agua, gas, municipalidad, etc.) estén regularizados.

  • Revisá posibles gravámenes o cargas sobre la propiedad. Que todo esté legalmente claro.

  • Tené preparado lo necesario para escrituraciones, patente de la construcción, planos (si los hay), certificados de servicios, paz y salvo, etc.

5. No tener estrategia de visibilidad ni marketing

El error: creer que poner un cartel “Se vende” o publicar en un solo portal alcanza. Dejar la venta a la suerte. Muchos propietarios dan por sentado que el comprador “va a aparecer”.

Cómo evitarlo:

  • Definí quién es el comprador ideal de tu casa: ¿familia grande? ¿Pareja joven? ¿Inversor? Eso cambia cómo vas a anunciar, a qué tipo de redes llegás, qué destacar.

  • Usá múltiples canales: además de los portales inmobiliarios clásicos, redes sociales, grupos locales, contactos de inmobiliarias, publicaciones profesionales.

  • Mostrá lo que atrae hoy: fotos buenas, recorridos virtuales (aunque sea con celular si se hace bien), videos, videos cortitos incluso para redes.

6. Ser inflexible en las visitas o la negociación

El error: imponer horarios imposibles, no permitir visitas en momentos razonables, rechazar ofertas sin analizarlas o caer en ofertas demasiado bajas sin plantear contrapropuestas.

Cómo evitarlo:

  • Sé flexible: más visitas = más chances. Coordiná horarios, permití que quien muestra la casa pueda hacerlo sin que todo dependa de vos.

  • Tené claro tu piso de negociación: lo mínimo que vas a aceptar, pero también escucha ofertas. A veces una oferta “no ideal” puede acercarte a otra mejor a través de negociación.

  • Contá con ayuda: un asesor inmobiliario con experiencia que pueda manejar las objeciones, las ofertas, y que no te deje llevar solo por lo emocional.

7. Subestimar los costos asociados a la venta

El error: pensar solo en el monto que te dará la venta y olvidarte de los gastos que vas a tener: comisiones, impuestos, escrituraciones, arreglos, mejoras previas, etc.

Cómo evitarlo:

  • Hacé un listado de todos los posibles gastos: comisión de la inmobiliaria, sellos, impuestos municipales o provinciales, costos legales/escribanía, gastos de puesta en valor, etc.

  • Sumá esos costos al presupuesto que hacés de lo que necesitarías recibir para cumplir lo que querés. Así evitas sorpresas.

  • Evaluá si lo que inviertas en mejoras o presentación se recupera con el valor final de la venta. A veces sí, otras veces no tanto.

8. Querer hacerlo todo solo (sin asesoría profesional)

El error: creer que esta venta “yo la manejo”, “total no es tan complicado”, “la inmobiliaria me va a cobrar mucho y lo pago yo solo”. Puede funcionar, pero muchas veces cuesta dinero, tiempo y sufrimiento de más.

Cómo evitarlo:

  • Trabajá con una inmobiliaria de confianza, con buena reputación, que tenga experiencia local, conocimiento del barrio, de las leyes, de los papeles.

  • Que ese asesor te explique claramente qué va a hacer: valoración, marketing, visitas, negociaciones, cierre del negocio. Que te muestre ejemplos pasados.

  • Considerá que la comisión no es un gasto, es inversión: un buen asesor puede ayudarte a obtener un mejor precio, evitar errores costosos, acelerar la venta.

Conclusión

Vender una casa en Argentina ―y especialmente en Córdoba― no es algo que hacés “al pasar”. Si pones atención a estos puntos, vas a ver la diferencia: menos demoras, menos dolores de cabeza, mejor precio, más satisfacción.

En Castiñeira Salguero sabemos lo que significa vender tu casa: lo hemos hecho cientos de veces. Y queremos acompañarte para que lo hagas seguro, rápido y con la mayor ganancia posible. Si querés, podemos hacer una evaluación gratuita de tu propiedad, mostrarte un plan personalizado para evitar estos errores, y acompañarte en todo el proceso.

¿ESTÁS PENSANDO EN VENDER TU CASA?